Consultando al Dr. Pontiroli

Un usuario anónimo le escribe al Dr. Pontiroli:

Estoy desesperada!!!,y le soy sincera usted no es el primer profesional con el que consulto,hace algunos años que me embarace y por una cosa o por otra se me paso el parto, desde ese momento convivo con una criatura adentro mio, al principio todo bien, pero se volvio incontrolable,...es un degenerado sexual..., y tiene todo a mano, o sea que ya voy por el cuarto hijo de mi propio hijo, desesperante no ? abuela alos 27 años, que van adecir los vecinos cuando se enteren...,ademas tambien tengo un foùnculo que me supura por el esternon, bueno doctor espero pueda ayudarme con este temita.muuchas gracias.

La respuesta del afamado y polémico maestro de las artes medicinales no se hizo esperar:

Hay, hay, hay kerida mía.. no se desespere, en mis largos años de rekorrer el mundo he dado vuelta el cielo y la tierra, me he enfrentado con bravas mareas y terribles volcanes envueltos en lava, he llegado hasta los confines del universo y perforado hasta el centro de la tierra.. y todo para que? podrá preguntarse, pues me ha guiado siempre un noble fin y es el de perseguir el secreto de la vida y la muerte.
Bien podré decirle que no he encontrado una mierda al respecto y hasta me olvidé qué karajo estaba buscando.. si no fuera por Anselmo mi vida carecería por completo de sentido.
Y en estos momentos de desolación y destierro recibo su carta, un kaso que para cualkier pelandrum de hospital podría resultar incomprensible, pero no para el Dr.Pontiroli, mi estimada.
Sólo he podido deskubrir en mi larga trayectoria dos kasos de esta irreverente patología que los sabios Cheketere bautizaron Manza-Panza, en alusión a las palabras que alkanzaban a oir del infante alojado cómodamente en el interior del vientre de su madre.
Sólo dos kasos mi añorada, como uno es el suyo le diré que el otro fue particularmente muy cerkano. Como no creo en las casualidades iré direkto al grano y sin más, mi bello hermano de sangre Rolando Pontiroli es el kaso y no había kaso. Más de cinko años demoré en deskubrir, atravezando la península genital del Asia menor, las sagradas escrituras legado de los sabios Cheketere. De allí volé en primera clase whisky y abano hasta enkontrarme frente a la vagina de mi madre. Aaaaaahhh, el irrestible aroma de una vagina, mi adorada, esperé hasta la hora de la siesta y me dispuse a comenzar el ritual, introduciendo de un envión mi kabeza entré y lo sorprendí a Rolando recostado cómodamente sobre un riñón, le pegué un par de gritos y con el kagazo que se pegó no le quedó más remedio que salir corriendo por el kulo de nuestra madre, donde lo esperaba Anselmo. Un par de chirlos pa que aprenda, que joder, pendejo atrevido, mokoso enterado... y se akabó. Podré decirle, deseada mía, que Rolando completó ya su maestría y es todo un hombre de pelo en pecho, lleva una vida mucho más allá de lo normal, que no es poko, como experimentado Maestro Pizzero.
Por lo tanto, mi amada, traiga hasta aquí su vagina, aaaaahh de sólo pensarlo, yo la estaré esperando ansiosamente para iniciar el ritual.